Contento y satisfecho, esas son las palabras que encuentro para definir mi primera “Travesera”.
Está claro que siempre aspiro al máximo, y venía con esa intención. Pero lo di
todo desde el principio al fin y el tiempo que tenía previsto sobre el papel, más o menos salió.
Posiblemente
es la carrera más dura pero a la vez bella, que he corrido nunca. El nivel era
altísimo al ser Campeonato de España FEDME,
y además se unió a última hora algún corredor de nombre internacional.
Los días
previos son tranquilos, intento distraerme con la familia y mis compañeros de
selección en un pequeño y tranquilo hotel a las afueras de Cabrales. En el día
previo me dedico a repasar la estrategia; como material, avituallamientos, meteorología, etc. Pero a pocas horas de la salida, la organización decide modificar
varias cosas con respecto a la regulación prevista de carrera. Por un lado, no
permite la ayuda externa ni siquiera en las zonas de avituallamiento, es decir «tu te las guisas y tú te las comes»
esto crea cierta polémica y revuelo entre todos los participantes y
seleccionadores. Por un lado muchos corredores vienen con un planing previo de
sus tomas de alimentación (yo entre
otros) y por otro los seleccionadores y equipos técnicos que han hecho un
gran esfuerzo tanto material, logístico y económico para poder estar aquí
ayudando a sus corredores y ahora no lo van a poder hacer.
Por el
contrario, otra de las cosas que se modifico (y esto es de agradecer), es que debido a la ausencia de nieve en zonas
altas y más peligrosas se decide no llevar crampones como material obligatorio,
puesto que el tiempo acompañaba y no era peligroso.
Bien, se
acerca la hora de la salida (2:00h pm) e intento relajarme, ya que dormir me es
imposible, pero por lo menos descanso tumbado.
A la una de
la mañana y junto con toda la selección de Castilla
y León nos vamos hacia el Repelao,
punto de salida. De camino en la furgoneta hay risas y buen rollo que nos sirve
para evadirnos y liberar tensión.
La
temperatura es buenísima, yo que soy algo friolero estoy en camiseta de manga
corta y sin pizca de frio, unos 16 grados, perfecto para correr. Rubén Nembra el spiquer, (un crack pero de los grandes) nos anima
y tras la cuenta atrás salimos en masa 300 valientes carretera arriba dirección
Covadonga.
La salida es rapidísima, y tras dos km por asfalto nos desviamos por un camino
estrecho de fila de a uno, algo embarrado y siempre picando para arriba hasta
el primer avituallamiento en Vega de
Enol. En este primer tramo de 10km,
intento no cebarme y no pasarme de vueltas, siempre intentando no perder de
vista la cabeza, llego a un grupo donde esta Nestar, Cucayo, el Americano Dakota
Jones y Javi Domínguez. Pregunto que quien va por delante ya que es noche
cerrada y no veo nada. Y me dicen. “Esto que ves es la cabeza...” ostia!! –Pienso- (la
noche me confunde...) Pues nada me pongo detrás y hacer camino. (Voy cómodo aquí)
En Vega de Enol, Iván Cucayo que se lo
conoce al dedillo, me dice que vamos muy rápido. Por debajo del tiempo de Merillas
el año del record. ¿Eso es bueno o malo? -Pregunto- (Cada uno lo interpretara a su manera)
Seguimos
subiendo y la primera subida de 2000m+ va haciendo mella, sin verlo ni quererlo
me pongo tercero, es una subida larga hasta el Collado la Fragua donde se puede
apreciar una hilera de luces que me muestra la magnitud y espectacularidad de la larga y
pendiente subida. Sigo avanzando y doy caza a Nestar que ni iba muy fino en ese
momento. Ya coronando y detrás de Dakota Jones, (que va distanciado), comienza
una bajada larga por la canal de Mesones,
la conozco y decido reservar algo de piernas, llego a Caín bastante bien, sobre el cuarto puesto o así, y con el tiempo
previsto (3h50’) y tras llenar los botes, y recibir los ánimos del pueblo de
Caín, Quico mi seleccionador y mejor
amigo, me da unas referencias valiosas y sobre todo me transmite serenidad y
cabeza. Como algo y comienzo una larga y dura subida a Dobresengos, canal que también conozco bien. Comienza a amanecer, y
ya se puede apreciar la grandeza de picos, apago el frontal (esto no me lo
quiero perder) y subo a mi ritmo sin prisa ni pausa, pero en la parte alta de
la canal ya casi en los Jous me
enganchan, un grupo de 4 corredores, Javi, Domínguez, Tito, Sebas, Manu Anguita
y David. Por delante nos dan referencias de Iván a unos 8' y de Dakota que va
también tocado. Me uno a este grupo y cogemos a Dakota. Tras pasar por varios
collados y llegar a una de las zonas para mi, mas bonita de carrera; La Horcada de Caín. Javi y sebas, se
les ve muy fuertes en busca de Iván y no hago intención de seguirles. Falta
mucho (pienso). Llegamos todos muy juntos y a pocos minutos al tercer
punto de avituallamiento; El Refugio de Urriellu. Allí esta Toño
también mi seleccionador y amigo, que me anima y me dice que voy muy bien.
Jajaja... (Bien de cojones) -Pienso-
Sigo centrado
y a mi ritmo (voy cumpliendo los tiempos).
Tras una zona técnica, por collados y roca viva, pasamos algún nevero y
llegamos a Collada Bonita... ufff. Qué Bonita es… pero dura y empinada también. Aquí cojo aire y tras un descenso, primero
bastante técnico con cuerdas y des trepes, sucede una larga bajada hasta Vega de Sotres, que se me hace muy muy
larga y así llego al cuarto avituallamiento algo cascado de piernas y no con
muy buenas sensaciones. Estoy pasando mal momento, pero me concentro he intento
mantenerme sereno. Km 48 y los árbitros me hacen control de material, pero mientras
aprovecho para comer y rellenar los botes. Además de beber bastante coca cola, que me hace que me cueste
arrancar después de esos minutos perdidos. Quico
como siempre, con su mano en mi espalda me anima, me dice que piense en los de
delante, que los voy a pillar... y yo pues me lo creo y me pongo a subir la
canal de Hidiellu como alma que
lleva el diablo... ufff... ésta se me hace eterna, infinita, demoledora... pero
pasito a pasito voy haciendo mi particular Everest.
Eso sí con un calor que me hace beberme el litro de agua en menos de 20'. Menos
mal que a mitad de canal apareció un paisano que me salvo la vida (para mí se merece el premio príncipe de Asturias)
ya que subió el solo a hombros y a mitad de canal un montón de agua
fresca, Coca-Colas, chocolate y demás alimentos, que me salvo de la pájara...
pero sobre todo lo que me salvó fue su amabilidad, su ayuda de forma
incondicional, su pasión por este deporte y por la montaña y me dio alas para
llegar al collado Valdominguero. Donde
aquí ya llegue con 25' de más de mis tiempos establecidos...
Pero bueno seguía
concentrado y mi cabeza empujaba más que mis piernas. Por detrás no veo a nadie
y delante tengo a Sebas a la vista pero lejos... me duele el flato y voy tocado
pero no hundido. No quiero dejar de correr, aquí he venido a darlo todo y poco
a poco voy corriendo más y más rápido. Una pista larga y siempre hacia abajo,
me lleva hasta el último control y avituallamiento, El Hitu km 58. Y es aquí cuando me cambia todo el cuerpo !Estoy Nuevo!!! Como puede ser?? -Me
pregunto- pues no lo sé, pero bebo agua,
lleno botes y de cabeza hasta el final. Aquí en este punto me animan amigos que han venido de Segovia, Ricar. Mil gracias tío!! Y me dan referencias, Sebas esta a 8' y David a 15'. Pues nada, a bajar con todo y a ver que sale. Tras pasar por los últimos repechos con mucho calor, casi todos corriendo por Portudera y un tramo de calzada muy técnica que baja hasta Cabrales, me siguen dando referencias y voy recortando muchísimo. En la calzada, ni me lo pienso y me vengo arriba, voy lanzado. Para mí no es una calzada Romana, es una Autopista sin límite de Velocidad. Veo a Sebas y le pido paso. Sigo sin aflojar, y bajo al pueblo, tramo de asfalto y al fondo veo a David. Pues nada, si me queda algo este es el momento de dejarlo todo. Empujar, empujar.. Y así a 100m de la meta lo pillo y entro junto con él y mi pequeño Oihan, que como siempre me espera en meta. Termino exhausto en quinta posición y con 12 horas.
lleno botes y de cabeza hasta el final. Aquí en este punto me animan amigos que han venido de Segovia, Ricar. Mil gracias tío!! Y me dan referencias, Sebas esta a 8' y David a 15'. Pues nada, a bajar con todo y a ver que sale. Tras pasar por los últimos repechos con mucho calor, casi todos corriendo por Portudera y un tramo de calzada muy técnica que baja hasta Cabrales, me siguen dando referencias y voy recortando muchísimo. En la calzada, ni me lo pienso y me vengo arriba, voy lanzado. Para mí no es una calzada Romana, es una Autopista sin límite de Velocidad. Veo a Sebas y le pido paso. Sigo sin aflojar, y bajo al pueblo, tramo de asfalto y al fondo veo a David. Pues nada, si me queda algo este es el momento de dejarlo todo. Empujar, empujar.. Y así a 100m de la meta lo pillo y entro junto con él y mi pequeño Oihan, que como siempre me espera en meta. Termino exhausto en quinta posición y con 12 horas.
REVENTADO,
pero feliz y eufórico de poder terminar con tanta energía una carrera tan dura
y exigente...
Después y
para continuar con el Ultra, me llaman
para el control antidoping, ¿parece lo más fácil después de 12h corriendo, no?
Pues no, otras 5 horas sin poder moverme hasta que salió la gotita...
Ha sido un
finde fabuloso, he sufrido como nunca, pero esta Travesera es una de estas que te dejan marcado...
A descansar
unos días y pronto volveremos a la carga....
FOTOS: Manuel. S. Calvo, Luis Lastra
FOTOS: Manuel. S. Calvo, Luis Lastra
Eres muy grande David !!!!
ResponderEliminarEs un placer leer tus vivencias
ResponderEliminar